Carta de Sor Juana Guillén en favor de una hermana necesitada

Carta escrita por Sor Juana Guillén pidiendo ayuda para conseguir un hábito para otra religiosa del convento que se encontraba en extrema pobreza. Bien conocida es la virtud de la caridad en Sor Juana, quien desde niña socorría a los más necesitados, repartiendo alimentos, ropas y enseñándoles con sencillez y ternura. Continuó esta labor dentro del convento, ayudando también a sus hermanas, llegando incluso a desprenderse de lo imprescindible, como su manta, colchón y ropa, por amor a los demás y a Jesucristo. Cuando no tenía con qué ayudar, buscaba quién lo hiciera, escribiendo cartas como ésta, que retratan, sin proponérselo, la hondura de su compasión. Desgraciadamente, no han llegado hasta nuestros días muchas cartas de Sor Juana Guillén. Según testimonio del Padre Gaspar Mancebón, su confesor y primer biógrafo, él mismo destruyó muchas de las que recibió por respeto a la intimidad de su alma, convencido de que ella viviría más que él, y queriendo evitar que cayeran en manos aj...